Cubismos en la Galería Tiempos Modernos
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En una entrevista que le hicieron antes de su muerte, contaba Kahnweiler que la primera vez que vio al joven Picasso le pareció simplemente extraordinario. Él trabajaba como marchante en el Paris de principios del XX y se encontraba en su galería cuando esto ocurrió, aunque todavía no sabía que, aquel joven rechoncho y mal vestido que tenía ante sus ojos, era Picasso. Después de aquel anónimo encuentro, escuchó hablar de un cuadro magnifico que un tal Picasso había pintado y esta vez no dudó en dirigirse a su estudio.Técnicamente se puede decir que todo empezó en ese estudio de la calle Ravignan número 13. Ahí fue donde Picasso planeó el cuadro, ahí fue donde lo pintó y ahí también donde no le quedó más remedio que enfrentarse a la soledad moral, víctima de la incomprensión. El cuadro no era otro que Las señoritas de Avignon que, aunque afirma Kahnweiler que Picasso lo consideraba como no terminado, se ha quedado exactamente como estaba.Hoy Las señoritas de Avignon cumple 100 años y con esta exposición Tiempos Modernos pretende celebrar el primer centenario de este movimiento tan provocador rindiendo homenaje a su creador por antonomasia. La exposición se ha concebido para que el espectador pueda palpar la impronta en el tiempo de esta tendencia de vanguardia. En ella se pueden ver obras del desaparecido Equipo Crónica y también de siete de los más destacados artistas españoles contemporáneos: Alfredo Alcaín (Premio Nacional de Pintura), Fernando Bellver, Alberto Corazón, Chema Madoz (Premio Nacional de Fotografía), Francisca Mompó, Nicolás Muller y Manolo Valdés. La muestra no sólo exhibe pinturas, recoge también fotografías, esculturas y grabados.Un aliciente añadido para los amantes del siglo XX es que esta galería es además una tienda especializada en Art Decó y antigüedades del siglo XX.